Ya habíamos cocinado un brazo gitano de hojaldre relleno de calabacín, y tal y como os dije en aquella ocasión los rellenos son infinitos. Hoy os traigo otra idea más que suelo hacer cuando mis sobrinos vienen a casa porque les encanta. Lo vamos a rellenar de lomo adobado de cerdo y queso. ¿Os gusta la idea? ¡Pues a cocinar!
-----------------------------------
INGREDIENTES
1 lámina de hojaldre
-----------------------------------
E L A B O R A C I Ó N
Preparamos el tomate
Lo primero que vamos a hacer es preparar el tomate para que se enfríe lo antes posible. Vamos a pelar los tomates, les vamos a extraer las yemas que desecharemos en esta ocasión. Picaremos la carne de los tomates en brunoise (dados pequeños) y a continuación lo sofreíremos en una sarten con un chorro de aceite de oliva virgen extra, media cucharadita de azúcar (para corregir la acidez) y una pizca de sal. Lo tendremos en el fuego hasta que pierda la mayor parte del agua. No queremos una salsa de tomate, así que lo vamos a reducir bastante hasta que quede un puré de tomate frito.
Montamos el brazo de gitano
Extendemos la lámina de hojaldre. Sobre ella extendemos una capa con nuestro puré de tomate frito y sobre la capa de tomate empezamos a colocar una sola capa con nuestros filetes de lomo adobado en crudo. Por último, cubrimos con unas lonchas de queso tierno. Debemos dejar un margen sobre la masa, no hay que cubrirla hasta el borde. Así que dejaremos un dedo de margen por todos los extremos. Empezamos a enrollarlo todo desde uno de los extremos hasta el final. Pintamos el brazo gitano huevo batido y ya lo tenemos listo para hornear. Espolvoreamos un poco de orégano seco por encima y lo hornearemos 45 minutos con el horno precalentado a 200º con calor por arriba y por abajo.
Es una receta deliciosa, ideal como entrante, como desayuno salado o para las meriendas. Es una de esas recetas que se disfruta el doble si lo haces en compañía. Estoy seguro de que la disfrutaréis tanto o más que yo. ¡Ya me contaréis si la probáis!
Consideraciones
- Reducimos bien el tomate frito, para que el exceso de agua que contiene no nos estropee demasiado la textura del hojaldre por dentro. Además conseguiremos un sabor más intenso del tomate.
- No hace falta cocinar el lomo, date cuenta que con el tiempo que se pasará en el horno se cocinará perfectamente
- Los rellenos son infinitos, así que después de probar este, ¿por qué no pruebas con otras combinaciones? ¡Imaginación al poder!
No hay comentarios:
Publicar un comentario
¿Tienes alguna duda? ¡No te cortes! SIEMPRE respondo los comentarios.