¡Hola gente güena!
Hace tiempo que no cocinamos un plato de pasta, y como tenía un lomo de salmón en casa he pensado que hoy podríamos tirarnos a la piscina con una receta de pasta y salmón que tantas satisfacciones nos dan siempre. ¿Os animáis? Pues...
¡A cocinar!
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I N G R E D I E N T E S
100 g de macarrones
Calorías aproximadas: 466 calorías
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E L A B O R A C I Ó N
Mientras ponemos a hervir la pasta siguiendo las instrucciones del fabricante haremos nuestro salmón y la salsa bechamel. El salmón lo limpiamos bien, le quitamos la piel y la espinas que encontremos. Una vez limpio lo cortamos en trozos de un bocado, los salpimentamos y los hacemos a la plancha. Ahora que están hechos los reservamos y hacemos nuestra bechamel.
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Bechamel de tomillo y jengibre
Cortamos en una brunoise muy fina (daditos pequeños) nuestra cebolla y la sofreímos en la sartén con un poco de aceite de oliva, pimienta negra y sal. Cuando esté doradita desglasamos con el vino blanco. En cuanto evapore el alcohol del vino, incorporamos la harina y empezamos a rehogarla hasta que funda con el aceite de oliva. En ese momemto vamos agregando la leche y removiendo despacito a medida que va espesando. Cuando espese lo suficiente rayamos jengibre fresco al gusto y un poco de tomillo. Si el tomillo es fresco mejor, si no pues seco.
Corregimos de sal si fuera necesario y la mantenemos caliente al fuego hasta el momento de emplatar la pasta.
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Ahora sólo nos queda emplatar. Mezclamos los macarrones escurridos con nuestro salmón y les ponemos nuestra salsa bechamel por encima. Podéis rayarle un poco más de jengibre fresco antes de servirlo, tomillo o pimienta como más os guste.
Una pasta deliciosa y sana. El tomillo y los sabores cítricos siempre le han ido bien a nuestro amigo el salmón así que esta bechamel le viene al pelo. Os gustará mucho, estoy convencido de ello. Mañana volveremos con más recetas güenas chicos, de todos modos nos seguimos viendo por el resto de redes sociales.
Consideraciones
- Si queréis una bechamel más fina podéis batirla. A mi me gusta sentir los trocitos de cebolla y por eso no la he batido.
- Si no tenéis jengibre a mano, podéis usar rayadura de limón. Pero recordar que es la parte amarilla del limón la que da ese sabor cítrico, la parte blanca amarga así que cuidadín.
- El tomillo fresco tiene mucho más aroma y potencia, pero si no tenéis el tomillo seco es también una buena opción.
- Cuidado con la cocción del salmón, sería una pena que os quedara seco. Marcarlo dejando el centro poco hecho y con el calor de la bechamel y los macarrones se os terminará de hacer en el mismo plato.
Me encanta sobre todo la bechamel con el jengibre y el tomillo tengo que probarla buen provecho
ResponderEliminarLe va genial a nuestro salmón ♥, tienes que probarla!
EliminarGracias Nati!
Estoy totalmente de acuerdo con Nati, tiene que estar buenísima 👌😋
ResponderEliminarFiate de ella, esta tremenda jajaja gracias guapa.
EliminarUn besazo!