Risotto ibérico al vino tinto con crujiente de jamón

Los que me conocéis sabéis que mi comida favorita es el arroz. Me gustan todos los arroces y entre todos los tipos de arroces que existen hubo una temporada que estuve absolutamente obsesionado con los risottos. Los hacía de cualquier cosa, no importaba. Su textura melosa y cremosa a la vez me volvían loco (hoy también). Así que recordando aquellos tiempos risotteros os traigo uno un poco españolizado que espero que os guste.

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I N G R E D I E N T E S

80 g de lomo de cerdo ibérico  1/2 cebolla dulce 1 diente de ajo  Arroz arborio (carnaroli o bomba)  150 ml de vino tinto  500 ml de caldo de hueso de jamón 1 loncha de paleta ibérica  1 cucharadita de mantequilla  25 g de queso manchego  Aceite de oliva virgen extra  Sal  
Calorías aproximadas: 541 calorías.

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E L A B O R A C I Ó N

Un vídeo publicado por Cositas Güenas (@migueortells) el 2 de May de 2016 a la(s) 5:50 PDT

Lo primero es picar media cebolla, un diente de ajo y trocear unos 80 gramos de lomo de cerdo (si es ibérico pues mejor).

Calentamos una cucharada de aceite de oliva virgen extra en una sartén y ponemos a hervir al lado un caldito de hueso de jamón. El caldo debe estar hirviendo durante todo el tiempo.

Doramos el ajo con la carne, y cuando esté dorada incorporamos la cebolla. Un par de minutos después echamos nuestro arroz (carnaroli o arborio, si no tenéis pues bomba y si tampoco un buen arroz redondo). En cuanto sofría un poco incorporamos una copita pequeña de vino tinto (el que más os guste). Una vez evapore el alcohol, empezamos a echar cazos de caldo y no dejamos de mover nuestro arroz. Cuando absorba el caldo, le echaremos más y así hasta dejar nuestro arroz al dente.

Mientras hacemos el crujiente de jamón. Metemos una loncha de jamón serrano entre dos láminas de papel vegetal de horno y lo introducimos 1 minuto en el microondas a máxima potencia.

Cuando el arroz esté al dente, apagamos el fuego y terminamos con un pellizco de mantequilla y queso manchego rallado. Emplatamos nuestro arroz delicioso y le ponemos nuestro crujiente de jamón encima.

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Consideraciones
- Debemos tener el caldo hirviendo al lado mientras hacemos el risotto. No useis el caldo frío porque afectaría a la cocción del arroz (muy lenta).
- No tenéis que usar cerdo ibérico si no queréis, podéis usar un cerdo blanco de buena calidad. Lo mismo ocurre con el crujiente de jamón, podéis usar un buen jamón serrano.
- También podéis usar cualquier otro queso que no sea manchego (Granna Padano o Parmesano también son una buena opción). Es más fácil rallar el queso si está frío, así que si lo guardáis previamente en el frigorífico mejor.

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Este es uno de mis risottos preferidos. Tiene un sabor intenso y debéis tener cuidado con la sal. Yo directamente no abusaría de ella, tened en cuenta que el crujiente de jamón sala bastante.

Es un plato para disfrutar con un buen rioja. Espero que lo disfrutéis mucho. Nos vemos en la próxima receta.

¡Hasta pronto!